Hacia algún tiempo que veníamos "rumiando" la visita a esta emblemática cumbre de Cantabria, sobre todo el amigo Txema que no había estado en ella desde hace bastante tiempo, y como ya está lo suficientemente recuperado de su cadera como para acometer esta caminata decidimos organizar el plan.
El primer paso, consultar la Meteo y el primer día de 🌞 previsto, arrancar.
El día elegido fué el Viernes 15 de Octubre así que a las 7,30 H. Txema, Fernándo (Peluti) y Yo arrancamos de Bilbao en el coche de Txema (como no) rumbo a Espinosa de Los Monteros y de allí por Las Machorras dirección Lunada hasta coger la desviación y llegar a El Bernacho punto de arranque de la ascensión, donde dejamos el coche bien aparcado y con la "orden" de que nos esperara hasta la vuelta.
En este punto, situado a 1.090 mt. de altura, cogemos nuestras mochilas y cargados de entusiasmo, comenzamos a caminar y sobre todo, dispuestos a disfrutar.
Nada mas comenzar, la ruta nos introduce en el bosque, un precioso hayedo que va ganando altura y nos invita a sacar una foto aquí y otra allá lo que va haciendo mas llevadera la ascensión, asi sin casi darnos cuenta alcanzamos El Collado La Canal, a 1.400 mt. entre el Castro Valnera y el Cubada Grande.
A partir de aquí cogemos un marcado sendero que sale a nuestra derecha hasta atravesar El Paso un pequeño y estrecho tramo encajonado entre dos rocas, desde este punto hay varios caminos que lle van a la cumbre, unos mas pendientes que otros, como no tenemos prisa elegimos el de nuestra derecha, mas largo pero menos "esforzado" y vamos ganando altura poco a poco entre tramos de tierra y gradas de roca desnuda por donde se progresa sin mayores dificultades y siempre gozando de un entorno espectacular hasta llegar a la cresta en donde se nos abren unas hermosas vistas, Santander y su bahía, en lontananza y los valles pasiegos a nuestros pies. Ya solo nos falta remontar los escalones rocosos que nos depositan en el buzón de la cima a 1.718 mt. de altura.
Después de "retozar" un rato en la cumbre, sacando las fotos de rigor y disfrutando del paisaje, emprendemos la bajada. Destrepamos los escalones de piedra y elegimos una ruta diferente a la de subida, seguimos ahora por la senda que discurre por el cresterío de los montes de Valnera contemplando las características formaciones herbosas, imposibles de transitar, que se desploman espectacularmente sobre el fondo del barranco (una pasada), hasta alcanzar el Collado de La Piluca 1.421 mt. entre el Castro Valnera y el Pico de La Miel.
Hubo un momento que pensamos si subir o no al Pico La Miel pero rápidamente decidimos por unanimidad que mejor otro día así que cogimos el sendero que, en descenso, se dirige hacia el valle, en principio sin problemas pero que a medida que vas bajando, se va cerrando de brezos y escobas que se hace difícil de transitar, menos mal que todos llevábamos pantalón largo que si no, pobres piernas, pero bueno, después de un poco de "sufrimiento" llegamos sanos y salvos a El Bernacho donde nos esperaba el coche, como habíamos convenido.
Después de cambiarnos convenientemente, nos dirigimos en coche hasta el alto del puerto de Lunada y lo bajamos por su vertiente "pasiega" hasta San Roque de Riomiera y en Casa Vicente nos metimos entre pecho y espalda un cocido montañés y unos huevos que no se los salta un gitano, para reponer fuerzas.
Ya solo nos quedaba volver a casa asi que bajamos a Liérganes y en Solares cogimos la autovía.
Resumen: Día sensacional en todos los aspectos
