Como las predicciones meteorológicas daban un tiempo estupendo para hoy, Patxi, Josetxu y Un servidor decidiomos hacer una excursión mañanera al corazón de Guipuzcoa para ascender al monte ERNIO de 1.075 mts. de altitud.
Salimos en coche desde Bilbao, a las 8,30 H. de la mañana, cogimos la a utopista hasta Elgoibar y luego tras pasar por Azkoitia y Azpeitia llegamos a Errezil , Seguimos por la carretera, unos 2 km. dirección Tolosa hasta el Hostal Trintxera, donde dejamos aparcado el coche y después de tomarnos unos "cafeses" en el bar comenzamos la marcha sobre las 10,15 H.
Niguno de los tres conocíamos la zona, pero no hay ningun problema porque la ruta está perfectamente señalizada y no hay mas que seguir las marcas de color rojo y blanco.
La marcha comienza en el aparcamiento del hostal por unas escaleras instaladas en el prado y después de atravesar unas campas, el camino discurre durante un rato por un sotobosque de hayas y continúa ascendiendo hasta el collado y campas de Zelatun, que alcanzamos en 1 hora.
El recorrido es precioso, parece que vas caminando por una blacón asomado continuamente al valle de Errezil, un verdadero recreo para nuestros ojos, que hace que el esfuerzo de la subida sea mas llevadero.
Desde el collado de Zelatun (Hasta donde se puede subir en coche por una pista desde Errezil) continuamos la ascensión hasta llegar a un paraje, ya cerca de la cumbre, donde nos encontramos con un pequeño refugio y la famosa cruz de "Los aros"y !!como no¡¡ realizamos el ritual de pasarnos algunos de los susodichos aros por los lugares del cuerpo donde tengamos alguna dolencia, pues se dice que se aliviará (no se yo).
Por fin llegamos a la cumbre tras Hora y media larga de recorrido, el lugar es muy peculiar, está plagado de cruces que denotan la espiritualidad ancestral del enclave, que se yo, cuantas puede haber, las hay de todos los tamaños, formas y colores.
Esta montaña que al estar ubicada practicamente en el centro georáfico de Guipuzcoa y no tener alrededor ninguna otra que "le haga sombra" se constituye en un mirador de primera categoria, con unas vistas excepcionales, de las que disfrutamos durante un buen rato, acompañados de un tiempo increible, sol, buena temperatura, ausencia de viento y eso que estamos en Octubre.
Despues de picar algo para reponer fuerzas, con harto pesar, emprendemos el descenso, desandando lo andado y, entre lo ameno del paisaje que nos rodea y nuestra charleta, casi sin darnos cuenta, a las dos menos veinte, estábamos en el coche.
Nos cambiamos y rumbo a Bilbao, a las tres, comiendo en casa. No se le puede pedir mas a una mañana de Otoño.
Todas las fotos, pincha AQUI: ERNIO (27/10/10)
miércoles, 27 de octubre de 2010
sábado, 2 de octubre de 2010
BERREA EN CAMPOO
Como todos los años por esta época ya ha empezado la berrea de los ciervos por los montes, así que ayer, Primer Día de Octubre decidimos acercarnos hasta el Alto de Campoo para ver que es lo que podíamos avistar de esta curiosa "ceremonia".
A las 7 de la mañana salimos de Bilbao, Toño (el experto y conocedor de la zona), Jon, Javier, Josetxu y Yo (digamos los panchitos) dirección a Reinosa, después de una breve parada en Espinilla, para comprar pan para el amaiketako y de paso tomar un café, llegamos a Brañavieja a las 10,05 H,
Como en la subida, desde el coche ya vimos un gran macho y dos hembras no muy lejos de la carretera, nada mas aparcar, nos calzamos las botas a toda prisa y con los priasmáticos en ristre nos echamos al monte con grandes espectativas.
A medida que vamos subiendo por la pista empezamos a oir insistentemente los bramidos de varios bichos, nos cuesta localizarlos, pero logramos ver otros dos grandes machos solitarios y alguna que otra hembra desperdigada, algo lejos para fotografiarlos.
La actividad de estos animales se centra principalmente a primeras horas de la mañana y al final de la tarde y como ya es casi mediodia apenas se mueven y como la vegetación de la zona es de brezo alto es dificil verlos, asi que aunque seguimos escuchando bramidos exporádicos, desistimos de verlos y nos dirigmos hacia la cumbre de Pico Cordel, una atalaya con excelentes vistas.
En la vertiente opuesta a la que hemos subido, la que da al valle de Polaciones, el terreno está mas despejado y hay grandes praderas, Toño nos comenta que otros años el ha visto por esta zona manadas de ciervos "berrando" como locos, pero hoy, nada de nada, solo un par de rebecos y una bandada grande de buitres, que le vamos a hacer, habrá que volver el años que viene (pero mas temprano).
Después de hacer un pequeño tentempié (unas sardinillas y unas frutas de Lezama) descendemos hasta el collado y siguiendo la cresta ganamos la cumbre de Peña Iján, otro mirador con vistas de primera.
La bajada la realizamos desde el collado de La Tabla por la cuenca del Rio Guares, que estaba precioso, hasta llegar a la pista por la habíamos subido.
Segun bajábamos avistamos otro macho con una cuerna descomunal que andaba por alli berreando despistado, igual era uno de los que habíamos visto a la subida, por la voz no lo conocimos.
Al llegar de nuevo a Brañavieja (las 14 H.) cogimos el coche y nos subimos hasta el aparcamiento de la Fuente del Chivo, desde donde pudimos ver, aunque un poco lejanos, unos cuantos ciervos mas deambulando tranquilamente por su entorno.
Dada la hora, en este lugar dimos por finalizada nuestra jornada de la berrea de este año. El amigo Toño, valorando lo visto, le dió una puntuación de 6 sobre 10, Yo que soy bastante exigente (o ignorante, quien sabe) igual me quedo en el 5 raspado.
Pero para rematar la jugada (y subir la puntuación del día hasta el tope) nos quedaba la comida que nos metimos en Abiada, en el restaurante La Cotera un buen y abundante menú, y por 15 euros, no te lo pierdas.
Después de la comida y una copita en La Cantina (no podía faltar) de nuevo regreso a Reinos y de alli carretera y manta hasta Bilbao, todos menos Toño que se quedó para repetir berrea al dia siguiente (seguro que madrugará mas).
Para ver todas las fotos. Pincha AQUI: Berrea Campoo (2010)
A las 7 de la mañana salimos de Bilbao, Toño (el experto y conocedor de la zona), Jon, Javier, Josetxu y Yo (digamos los panchitos) dirección a Reinosa, después de una breve parada en Espinilla, para comprar pan para el amaiketako y de paso tomar un café, llegamos a Brañavieja a las 10,05 H,
Como en la subida, desde el coche ya vimos un gran macho y dos hembras no muy lejos de la carretera, nada mas aparcar, nos calzamos las botas a toda prisa y con los priasmáticos en ristre nos echamos al monte con grandes espectativas.
A medida que vamos subiendo por la pista empezamos a oir insistentemente los bramidos de varios bichos, nos cuesta localizarlos, pero logramos ver otros dos grandes machos solitarios y alguna que otra hembra desperdigada, algo lejos para fotografiarlos.
La actividad de estos animales se centra principalmente a primeras horas de la mañana y al final de la tarde y como ya es casi mediodia apenas se mueven y como la vegetación de la zona es de brezo alto es dificil verlos, asi que aunque seguimos escuchando bramidos exporádicos, desistimos de verlos y nos dirigmos hacia la cumbre de Pico Cordel, una atalaya con excelentes vistas.
En la vertiente opuesta a la que hemos subido, la que da al valle de Polaciones, el terreno está mas despejado y hay grandes praderas, Toño nos comenta que otros años el ha visto por esta zona manadas de ciervos "berrando" como locos, pero hoy, nada de nada, solo un par de rebecos y una bandada grande de buitres, que le vamos a hacer, habrá que volver el años que viene (pero mas temprano).
Después de hacer un pequeño tentempié (unas sardinillas y unas frutas de Lezama) descendemos hasta el collado y siguiendo la cresta ganamos la cumbre de Peña Iján, otro mirador con vistas de primera.
La bajada la realizamos desde el collado de La Tabla por la cuenca del Rio Guares, que estaba precioso, hasta llegar a la pista por la habíamos subido.
Segun bajábamos avistamos otro macho con una cuerna descomunal que andaba por alli berreando despistado, igual era uno de los que habíamos visto a la subida, por la voz no lo conocimos.
Al llegar de nuevo a Brañavieja (las 14 H.) cogimos el coche y nos subimos hasta el aparcamiento de la Fuente del Chivo, desde donde pudimos ver, aunque un poco lejanos, unos cuantos ciervos mas deambulando tranquilamente por su entorno.
Dada la hora, en este lugar dimos por finalizada nuestra jornada de la berrea de este año. El amigo Toño, valorando lo visto, le dió una puntuación de 6 sobre 10, Yo que soy bastante exigente (o ignorante, quien sabe) igual me quedo en el 5 raspado.
Pero para rematar la jugada (y subir la puntuación del día hasta el tope) nos quedaba la comida que nos metimos en Abiada, en el restaurante La Cotera un buen y abundante menú, y por 15 euros, no te lo pierdas.
Después de la comida y una copita en La Cantina (no podía faltar) de nuevo regreso a Reinos y de alli carretera y manta hasta Bilbao, todos menos Toño que se quedó para repetir berrea al dia siguiente (seguro que madrugará mas).
Para ver todas las fotos. Pincha AQUI: Berrea Campoo (2010)
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